CUERPO-ALMA Y ESPIRITU

CUERPO – ALMA Y ESPIRITU…

Discrepando con lo que las ciencias humanistas y la opinión común sostienen, la Biblia afirma que el hombre no es un ser dual de alma y cuerpo, sino tripartito, con espíritu, alma y cuerpo.
( Fuente aguas vivas)

Escuchamos que el alma y el espíritu es lo mismo sin cuestionarlo, hoy entiendo que son dos cosas totalmente distintas y que además son parte de la triada que conformamos… nosotros somos cuerpo, alma y espíritu… más no solo una dualidad…
Se habla de unificarnos, de no vivir en dualidad…reconozco que sí somos en parte dualidad, yin yang, claro- oscuro, femenino- masculino, triste- alegre, agresor-víctima, soberbia-humilde, etc., son nuestras polaridades y estas se encuentran en el alma y en el cuerpo. Así como tenemos dos hemisferios cerebrales, nuestro cuerpo es asimétrico. Si nos partieran por mitad estas dos partes no son idénticas; son totalmente distintas. Sin embargo estás unidas, conforman la totalidad de nuestro cuerpo, pues lo mismo sucede con nuestras polaridades que son parte del alma, nuestra psique. Si nuestra intención fuese aceptarlas e integrarlas esto sería la unificación en el alma. Sin embargo, la tercera parte y la más importante es el espíritu; la parte divina en nosotros. Estas tres partes conforman la triada. Conseguir la unificación y darnos cuenta de la importancia de la jerarquía nos llevaría a un nivel de vibración muy alto que serviría para alinearnos con los cambios venideros.
Si dejáramos que el Espíritu nos gobierne, los seres humanos estaríamos preparados para cualquier cambio que origine una hecatombe en el alma y en el cuerpo…Nosotros fuimos creados a semejanza de Dios, Padre hijo y Espíritu Santo; rescatemos nuestra esencia.
Nosotros somos una triada, más no solo una dualidad y la integración de estas tres partes nos conducen a la perfección. Así lo entiendo y lo siento ahora, lo entenderás y sentirás tú también?
Según la filosofía del reverendo Darío Silva… somos realmente una trinidad…aquí la definición de las tres partes:
Definición del Griego:
Espíritu = neuma = soplo
Alma = psique = mente
Cuerpo= soma = materia
La Palabra de Dios no divide al hombre en dos partes, sino en tres, espíritu, alma y cuerpo. En la carta de Pablo a los Tesalonicenses.(1ª Tesalonicenses 5:23). Y el mismo Dios de paz os santifique por completo; y todo vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sea guardado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo".
El espíritu es la parte divina; es Dios en nosotros; es la presencia Yo soy. Establecemos aquí una conexión y comunicación con Dios, somos Dios en esencia, sin explicación para la mente humana, sin definición científica, simplemente ES, y es a través del Espíritu, que somos capaces de sentir respuestas. Es nuestra intuición, es la parte que discierne entre lo bueno y lo malo, es el lugar santísimo, es la parte que si gobernara la triada seríamos capaces de ser perfectos. Si reconocemos nuestro espíritu, este será capaz de gobernar el alma y el cuerpo. Aquí encontramos la diferencia entre ser espiritual y ser carnal..
El alma, es la manifestación de la personalidad; es el alma que recibió el regalo de Dios, nuestro libre albedrío, poder que Dios nos concedió y ni Él es capaz de violar el privilegio de nuestro regalo.
Aquí se encuentran nuestras emociones, pensamientos, sentimientos, deseos, nuestra voluntad, la mente, causante de muchas de nuestras equivocaciones, una de ellas, pensar que puede dominarnos, que es ésta la que maneja nuestra existencia, inclusive capaz de dominar al espíritu, logrando así alejarnos cada vez más de Dios.
El cuerpo es el vehículo para la manifestación de la obra de Dios, nosotros…
Y Dios se hizo hombre…"El Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros" (Juan 1, 14)
Sin embargo el cuerpo tiene necesidades muy fuertes y aquí está el problema porque quiere satisfacer todas sus necesidades dominando así al alma. De esta manera somos capaces, gracias a nuestro libre albedrío, de caer en exigencias del cuerpo, exigencias que podrían alejarnos aún más de la parte más importante de nosotros, EL ESPÍRITU.
Entendamos entonces que las enfermedades del cuerpo se deben a la lejanía establecida con el espíritu.
El espíritu es capaz de sanar todo, alma (emociones) y cuerpo (enfermedades).
Recuperar nuestra conexión espiritual, en estos momentos, es la mejor decisión que nuestro libre albedrío podría tomar. Los cambios se están dando en el planeta y nuestra vibración podría elevarse si tomamos conciencia de que somos la triada. Seamos Espíritu en acción.
Por amor a Dios y con la convicción de que ser espiritualmente fuertes nos conducirá a recuperar lo que perdimos hace siglos… Nuestra divinidad… comparto este artículo con ustedes, que si llegaron a leerlo es porque algo de esta verdad resonará en ustedes tres.

Lucía Rodríguez larraín V.B.

Terapeuta Holística
http://www.lrlholistica.com/